1. Cual rocío que destila en la yerba del vergel, tu palabra salvadora llega a tu pueblo fiel.
2. Deja, Padre bondadoso, tu doctrina destilar, bendecida para darnos el eterno bienestar.
3. Ve, oh Padre, a tu pueblo y permite descender de tu trono bendiciones cual rocío al caer.
4. Nuestra petición escucha y derrama, ̮eterno Dios, tu Espíritu sublime, muestra de Tu gran amor.