1. ¡Mirad! Reales huestes ya entran a luchar
con armas y banderas, el mal a conquistar.
Sus filas ya rebosan con hombres de valor
que siguen al Caudillo y cantan con vigor:
¡A vencer, a vencer por Él que nos salva!
¡A vencer, a vencer por Cristo Rey Jesús!
¡A vencer, a vencer, a vencer por Cristo Rey Jesús!
2. El enemigo viene con fuerzas a luchar,
mas ellos no le temen; les sobra el valor.
Y su Caudillo grita: “Sed fieles sin temor”;
y miran su bandera y cantan con vigor:
¡A vencer, a vencer por Él que nos salva!
¡A vencer, a vencer por Cristo Rey Jesús!
¡A vencer, a vencer, a vencer por Cristo Rey Jesús!
3. Y cuando se acabe tan larga lucha cruel,
y todos ya descansen con su Caudillo fiel,
a Cristo Rey eterno, las huestes con amor
le alzarán victorias, cantando con vigor:
¡A vencer, a vencer por Él que nos salva!
¡A vencer, a vencer por Cristo Rey Jesús!
¡A vencer, a vencer, a vencer por Cristo Rey Jesús!
Letra: Fanny J. Crosby, 1820–1915.
Música: Adam Geibel, 1855–1933.